La creatividad entendida como la facultad para proponer soluciones variadas a problemas similares, es un componente esencial en la publicidad, que se puede aprender con una metodología adecuada, pero que requiere mucha dedicación, además que ésta por el transcurso del tiempo va perdiendo capacidad para proponer nuevas alternativas, esto es algo que un publicista debe tener siempre presente por que en algún momento de su vida lo va a experimentar y debe estar preparado para enfrentarlo de la mejor manera.
El publicista necesita incrementar sus dosis de creatividad natural, ya que al llegar a este mundo su ser internó contiene todos los componentes mentales que le permite ser creativo, pero, lamentablemente, en el transcurso de su vida, por diversas razones entendibles va perdiendo la destreza para crear o proponer nuevas alternativas. Por este motivo el publicista debe rescatar su cuota de creatividad y potenciarla al máximo.
Pero no solo la falta de creatividad afecta el trabajo del publicista, sino, que también tener la información correcta para poder desarrollar una buena estrategia creativa. La base para una estrategia creativa eficaz parte de tener una fuente de información valida, factible de comprobar. Especialmente si el afán de la creatividad es enriquecer una campaña publicitaria.
José Peñafiel Moreno
Director Verbum empresarial